¿Es bueno que se juegue al fútbol y se monte en bici en la plaza?
¿Se pone en peligro a personas más pequeñas o a personas mayores?
¿Cuánta superficie de la plaza es utilizada sólo por quienes juegan al fútbol o montan en bici?
Cuando no se juega al fútbol o se monta en bici en la plaza, ¿se utiliza ésta para otras actividades?
Limitan estas actividades el uso del espacio a las demás personas?
¿Cuál es la proporción chicas-chicos en la plaza?
¿Hay otros espacios donde montar en bici o jugar al fútbol sin generar peligro para nadie?
¿Hay algún modo de que sean compatibles usos diversos?
Cuando convocamos una reunión, por ejemplo, para organizar las fiestas del pueblo…
¿Qué canales de difusión utilizamos para que la convocatoria de la reunión llegue a todo el mundo?
¿Ponemos servicio de guardería y ludoteca durante la reunión?
¿Nos parecería raro ver a bebés en la reunión?
¿Qué factores tenemos en cuenta a la hora de elegir día y hora de las reuniones? ¿Nos aseguramos de que la reunión no dura más de dos horas para que sea compatible con las responsabilidades familiares de todo el vecindario?
¿Cómo gestionamos los turnos de palabra? ¿Qué mecanismos utilizamos para hacer uso de la palabra?
¿Continuamos las reuniones y se toman decisiones en los llamados espacios informales (por ejemplo durante «las cañas» de después)?.
Cuando organizamos actividades pensando en que sean del disfrute de todo el vecindario, hemos de tener en cuenta las necesidades y los intereses de toda la población y para asegurarnos de que así sea, tendremos que facilitar la participación de todo el mundo en su organización.
La perspectiva de género nos ayuda a detectar los condicionantes que interfieren en la posibilidad real de que tanto mujeres como hombres participen en todas las fases del proceso y de que sus opiniones y propuestas sean tomadas en cuenta de la misma manera.
Por distintos motivos sociales y culturales la organización del tiempo y de las responsabilidades es diferente para mujeres y hombres. Tenerlo presente en el diseño de la estrategia de participación ciudadana nos ayudará a posibilitar un similar acceso de mujeres y hombres en el proceso de toma de decisiones que garantice un mayor grado de representatividad. En esto consistiría aplicar el enfoque de género en el área de participación ciudadana.
Este enfoque de género se puede (y se debe) aplicar a todas las áreas de la gestión municipal: al urbanismo (por ejemplo, analizando cómo se utilizan los espacios por mujeres y hombres); a los deportes, etc., ya que no existen las acciones «neutras» en cuanto a su impacto de género. Las acciones y los resultados de las mismas disminuirán, ampliarán o mantendrán la brecha de género en las distintas áreas. Una política municipal que tiene esto en cuenta, analizará desde la perspectiva de género sus propuestas con el fin de disminuir dicha brecha.
HACERSE Y RESPONDER ESTAS PREGUNTAS ES HACER POLÍTICA MUNICIPAL CON ENFOQUE DE GÉNERO. ANALIZAR SI LAS DECISIONES TOMADAS TIENEN UN IMPACTO DIFERENCIAL EN MUJERES Y HOMBRES Y TOMAR DECISIONES EN CONSECUENCIA, TENDENTES A QUE NO HAYA UNA PARTE DE LA POBLACIÓN QUE SE BENEFICIE MENOS QUE OTRA, SE GARANTIZA LA EQUIDAD (NO LO MISMO QUE IGUALDAD).

Equipo dinamizador de la Campaña «Muévete contra las VIolencias Machistas» de Bustarviejo
María Juárez, experta en género
Raúl San Juan, alcalde de Bustarviejo