Las fiestas de este verano han recortado gastos, pero también en todos los pueblos han apostado por aquellas actividades que no generan grandes gastos y que entusiasman a sus participantes. En Lozoya uno de los clásicos del verano es una carrera popular. Este año trasladaron el recorrido al camino natural, junto al arroyo de la Fuensanta.
{phocagallery view=category|categoryid=42|limitstart=0|limitcount=0}Sólo había que ver la cara de los participantes, de todas las edades y sexos, para ver el empeño y su ilusión.
Otros que volvieron a entusiasmar a los congregados fueron los Chichos, que con sus clásicas canciones les devolvió muchos recuerdos a muchos de los asistentes. La gymkana para adultos o la infantil organizada por la asociación Roble Moreno, complementaron a las noches de orquestas.