La Asociación Cultural y Recreativa de Villavieja del Lozoya (ACRV) ha venido manteniendo, durante los meses de confinamiento, toda la actividad que le era posible a través de su grupo de whatsapp. La comunicación digital hizo posible pasar información entre los miembros de la asociación sobre el curso de la pandemia, disfrutar en común de videos de entretenimiento o de interés social, expresar el estado de ánimo de cada uno, mostrar modelos caseros de mascarillas (y hasta emprender su confección) así como seguir la evolución de la enfermedad  en Villavieja y en general en la Sierra Norte de Madrid, etc. 

El grupo de whatsapp  contribuyó a mantener la moral alta dentro de la Asociación, en espera de que comenzase la desescalada y así poder entrar en una cierta normalidad de relaciones personales. El confinamiento no nos paralizó.

En el mes de julio ya fue posible reunirse,  hacer la Asamblea Anual, replantearse el  rumbo y las limitaciones que debería tener la Asociación en diversos asuntos, renovar los órganos directivos y trazar un plan de actividades, siempre contando con las limitaciones que han impuesto las autoridades.

En años anteriores, la ACRV venía participando en la Semana Cultural de las fiestas patronales de Villavieja, convocando un concurso de cuentos, sin más ánimo que despertar la participación a nivel local. Este año, tan diferente a los que nos precedieron,  se ha intentado que la convocatoria tuviese un mayor alcance utilizando para difundirla no solo la página web de la asociación, sino recurriendo a las redes sociales y a SENDA NORTE. También se dio un mayor margen a  la temática literaria, extendiéndola a otros géneros, sin dejar de lado el reportaje e incluso la poesía.

Al mismo tiempo se decidió ampliar la convocatoria al campo de la fotografía, un arte cada vez más al alcance de los aficionados, lo que se puso de relieve por el alto número de fotografías que se presentaron al concurso. 

El domingo día 27 de septiembre se reunieron los jurados respectivos en el local cedido por el Ayuntamiento (Casa de Mujeres) para evaluar las obras de narrativa y las fotografías presentadas a concurso. Cada jurado estaba compuesto por dos miembros de la asociación y un simpatizante,  con el fin de intentar que el fallo tuviese la máxima  objetividad.

En el apartado de relatos, resultó premiado el cuento  titulado “Invisible” de Eva Olivé Sales. En un par de folios ha demostrado poseer  un buen dominio de los recursos literarios para despertar el interés de los lectores introduciendo, al mismo tiempo, una temática que los usos sociales hacen cada vez más presente: el hecho de “ver” a través del móvil, mientras las personas “reales” permanecen invisibles. El resto de las narraciones presentadas a concurso también alcanzan un buen nivel  y, por ello, la ACRV  ha decidido hacer una publicación con todas ellas para que lleguen a un mayor número de lectores e ir consolidando la convocatoria.

En cuanto al apartado de fotografía, la obra premiada lleva por título “Dando vuelta al embalse desde Buitrago de Lozoya”, una panorámica en blanco y negro en el que las aguas tranquilas del pantano reflejan la vegetación de las orillas.  Su autora es María Teresa García Delgado. La temática de las fotos a concurso ha sido muy amplia, destacando el paisaje, los celajes y atardeceres, el agua brava de los arroyos serranos, el caserío de sus pueblos, la ganadería, la fauna silvestre  y la vegetación, sin que esté ausente tampoco el elemento humano.

Los premios han consistido en dos invitaciones para dos personas en la Hospedería El Arco, de Villavieja del Lozoya, un establecimiento del que podemos estar orgullosos por su tradición gastronómica y esmerado servicio a los clientes.