El 2 de agosto Rascafría vivió un día de unión y reivindicación. A las 8.30 de la tarde, se leyó un manifiesto a favor de la reapertura del hotel de Snta Maria del Paular. La lectura se iba hacer inicialmente en el salón de plenos del Ayuntamiento, pero la afluencia de público hizo que se trasladará a la plaza de la Villa, donde Juan Carlos Galán (antiguo trabajador del hotel), leyó el manifiesto.

Los vecinos de Rascafría que se concentraron en la plaza, pudieron vivir un hecho, no fácil de vivir en los últimos tiempos en el pueblo, la unión de todos los concejales de las cuatros formaciones, olvidando discrepancias personales, con  su alcalde al frente, Santiago Marcos. Además estuvieron presentes los alcaldes de Alameda, Roberto Canencia; Pinilla del Valle, Juan Carlos Tejedor, así como el concejal de Garganta de los Montes, Juan Carlos Carretero. El Comisionado del Gobierno de la Comunidad de Madrid para la Revitalización de los Municipios Rurales, Rafael González también acudió para apoyar la reivindicación.

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Al finalizar el acto se distribuyeron unas hojas para que se firmará el manifiesto. Hay también abierta en change.org una iniciativa en este sentido.

Juan Carlos Galán señaló que la petición de reapertura no sólo la apoyan los vecinos del valle, también políticos, economistas, deportistas, artistas…

El hotel de Santa María de El Paular cerró sus puertas hace cinco años, dejando en la calle a 54 empleados directos, a los que había que sumar los empleos indirectos, a tiempo parcial que repercutían en el empleo de todo el valle. Los promotores creen que la mejor solución sería convertirlo en un parador. Un edificio emblemático en pleno Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.

Desde 2014, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte firmó una encomienda para la gestión del uso y la explotación del conjunto monumental con la empresa pública Tragsa. En este tiempo se han celebrado dos concursos para su explotación. El primero quedó desierto. Tras fracasar, se redactó un nuevo pliego de condiciones que tampoco ha logrado seducir a las grandes cadenas hoteleras. «Necesitan entre 8 y 10 millones de inversión para renovarlas», explican desde Rascafría como principal hándicap para su reapertura como hotel privado. «Por eso creemos que la mejor opción es que lo explote directamente Paradores Nacionales», defienden.

Tragsa, sin embargo, no está haciendo nada para evitar el grave deterioro de las instalaciones. Senda Norte ha podido saber que el deterioro puede llegar a poner en riesgo algunas de las estructuras.

Los que han recorrido recientemente las instalaciones hablan de un fuerte olor a humedad malsana, del salitre comiéndose los suelos de madera, de un mosaico despréndiendose, las pintura paredes de la ermita que hay en la entrada del hotel se está cayendo, y las piedras en riesgo de caerse.

Además inversiones realizadas en los últimos años de gestión del hotel se están estropeando por falta de mantenimiento como la piscina.

Ahora que empiezan a existir movimientos en el parlamento, no hay que olvidar de que fue durante el gobierno de Mariano Rajoy (PP) cuando se cerró el hotel; y que durante el año de gobierno de Pedro Sánchez (PSOE) no se ha hecho ningún movimiento.

El conjunto monumental está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Monumento desde 1876. Es de titularidad estatal y está adscrito al Ministerio de Cultura y Deporte